Uagadugú, 27 ago (EFE).- Estados Unidos condenó este martes el brutal ataque perpetrado por yihadistas el pasado sábado en el centro-norte de Burkina Faso, en el que murieron tanto civiles como miembros de las fuerzas de seguridad burkinesas.
“Los Estados Unidos condenan enérgicamente el ataque terrorista del 24 de agosto en Barsalogho, en Burkina Faso. Extendemos nuestro más sentido pésame a las familias de las víctimas y apoyamos los esfuerzos para llevar ante la justicia a los perpetradores de este acto atroz”, dijo la Embajada de EE.UU. en el país africano a través de la red social X.
La misión diplomática destacó también su “profunda preocupación por los millones de personas que se han visto obligadas a abandonar sus hogares por la actual violencia terrorista”.
El ataque fue reivindicado por el Grupo por el Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM, por sus siglas en árabe), una organización ligada a la red terrorista Al Qaeda.
El JNIM cifró en hasta 200 el número de muertos, aunque no hay confirmación oficial al respecto, por ahora, y EFE no ha podido corroborar de manera independiente ese extremo.
Tampoco detalló el número de víctimas el portavoz del Ejecutivo burkinés, Jean-Emmanuel Ouédraogo, que visitó el domingo con una delegación gubernamental el hospital de la cercana urbe de Kaya, a donde fueron trasladados heridos del ataque.
Según Ouédraogo, “la mayoría de las víctimas son civiles inocentes, mujeres, niños, hombres y ancianos”.
Según declararon fuentes locales a medios internacionales, los terroristas cometieron el ataque mientras los vecinos de Barsalogho cumplían con las órdenes militares de cavar trincheras para frenar el avance yihadista.
Al parecer, la población se había negado antes a ayudar a las fuerzas de seguridad en esa tarea al temer, precisamente, represalias de los terroristas.
Burkina Faso se enfrenta, desde 2015, a varios grupos yihadistas que están ligados tanto a Al Qaeda como al Estado Islámico, controlan muchas zonas del país y atacan constantemente a la población.
Miles de personas han muerto en numerosos ataques y más de dos millones se han visto obligadas a abandonar sus hogares.
El país encajó dos golpes de Estado en 2022: uno el 24 de enero, dirigido por el teniente coronel Paul-Henri Sandaogo Damiba, y otro el 30 de septiembre, encabezado por el capitán Ibrahim Traoré, quien dirige actualmente la nación.
Ambos golpes llegaron tras el descontento entre la población y el Ejército por los incesantes ataques yihadistas. EFE
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